Todos estamos de acuerdo en que el equipo informático en la clínica podológica es una herramienta imprescindible. Hoy en día es impensable trabajar sin ordenadores, aunque no se utilicen para todas las tareas del día a día como en el caso de la historia clínica informatizada. Sin embargo, aunque solo sea para disponer de una pequeña agenda dónde anotar las citas o una impresora para entregar recibos, en todos los centros hay algún equipo informático. El objetivo de este artículo es dar a conocer cuales son los elementos básicos de un equipo informático que no deberían faltar en ninguna clínica y dar algunas claves para su mejor utilización y aprovechamiento.
El ordenador
El elemento central en la planificación informática de toda clínica podológica debería ser el ordenador. Hay muchos modelos de ordenadores, de sobremesa o portátiles, con mayores o menores prestaciones, etc. El ordenador básico para una clínica no es necesario que sea muy potente: cualquier PC o MAC de los que se comercializa en grandes superficies hoy en día es más que suficiente. Personalmente, me fijaría más en que tenga una buena pantalla (grande y que acepte grandes resoluciones e incluso, si llega el presupuesto, que sea táctil) que en otros aspectos como memoria, procesador o espacio de almacenamiento en disco. El sistema operativo que lleve también carece de importancia y va a depender más del software que queramos instalar que de otra cosa.
El software
Para que el ordenador funcione necesita tener programas. Algunos programas muy básicos como los procesadores de texto o las hojas de cálculo y otros son mucho más complejos o específicos como podría ser un programa de gestión integral de la clínica. En todos los casos, hay siempre dos opciones: los programas instalados en el propio ordenador y los programas en la nube. Los primeros son los programas de siempre, ya en declive, mientras los programas en la nube nos ofrecen un sin fin de posibilidades y una comodidad inimaginable hasta la fecha. Sobre el software podríamos escribir un artículo entero (y lo haremos), aunque nuestra recomendación es siempre utilizar programas integrales en la nube (integrales en el sentido que contengan todo lo que la gestión de la clínica necesita).
La conexión a Internet
Estar conectado a Internet es fundamental tanto para estar informado de las últimas novedades en nuestra profesión como para poder ejecutar programas en la nube si nos decidimos por esta forma de trabajar. Lo más importante aquí es que la conexión sea rápida y fiable. Las conexiones de fibra óptica son lo más aconsejable, aunque el ADSL y las nuevas opciones de Internet por satélite tampoco son malas opciones. También es recomendable, si disponemos de presupuesto suficiente tener una segunda conexión de emergencia (por ejemplo, tener una ADSL para el ordenador principal y, por si acaso, contratar una línea de datos en nuestro dispositivo móvil que en caso de emergencia podrá dar acceso de Internet al ordenador).
El router
Asociado a la conexión de Internet, tenemos el router. El router es ese aparatito con lucecitas y una o varias antenas que nos ofrece conexión a Internet vía cable o vía wifi. El router es un elemento clave en la seguridad de nuestra clínica. Aunque parezca de sentido común: nadie de fuera de la clínica debe tener acceso al router. Si es posible se conectarán los ordenadores por cable y se desactivará la wifi. Si no hay más remedio que activar la wifi, lo más recomendable es solicitar a un profesional que configure la red para que sea lo más segura que sea posible. Y lo que jamás hay que hacer es dejar la red abierta o decirle a nadie la contraseña de la wifi (si se quiere ofrecer wifi gratuita en la clínica para los pacientes, hacerlo con una segunda conexión, jamás con la de trabajo).
La impresora
Fundamental. Es imprescindible para imprimir facturas o tickets, para sacar informes que queremos entregar a los pacientes o para imprimir las hojas de consentimiento que deben firmar. Lo importante aquí es que sea rápida y silenciosa.
El escáner
Un escáner en principio nos podría parecer un elemento poco útil, pero es la pieza clave para conseguir una clínica sin papeles (paper-less). La legislación española es muy severa en cuanto al tema los consentimientos, por lo que de una manera u otra a cada paciente que llega a la clínica se le debe hacer firmar uno. ¿Y hay que guardar todas esas hojas firmadas? NO, la ley permite escanearlas y guardarlas electrónicamente. Algunos programas (como PodoRed) te permiten guardar electrónicamente las hojas escaneadas junto a la historia clínica del paciente, de manera que nunca se pierda.
La tablet
Una tablet Android o un iPad pueden ser un fiel compañero durante las exploraciones a pacientes. Tener un ordenador en la clínica no siempre es suficiente, ya que actualizar la historia clínica mientras exploramos es complicado. Por eso una tablet es ideal, ya que la podemos llevar encima e ir anotando lo que veamos. Nuestra recomendación es que tenga una buena pantalla de al menos 9 pulgadas, que sea ligera y resistente (piensa que puede caer o puede salpicarse de algún producto o sustancia).
Y tu, ¿qué equipo tienes? ¿Crees que nos falta algo?
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